Después de las fuertes crñíticas por el nuevo impuesto a las operaciones con crioptoactivo en suelo británico, John Glen, Secretario del Tesoro de Reino Unido, reconoció que la regulación de las criptomonedas es cada vez más “complicada y difícil”.
Las críticas al nuevo impuesto destacaban que hacían diferencias entre las criptomonedas y los servicios financieros tradicionales. Glen admitió ese problema y explicó que considera necesario que haya igualdad de condiciones en la regulación entre los comerciantes de criptodivisas y la industria de servicios financieros en general a raíz de la creciente popularidad de las criptomonedas.
Aseguró también que están analizando incluir a los activos digitales descentralizados en la Autoridad de Conducta Financiera (FCA) para que aprovechen todas las promociones. “Esto crearía una mayor igualdad de condiciones en cuanto a las expectativas de imparcialidad y claridad que existen en el sector de los servicios financieros en general”.
La Autoridad de Conducta Financiera (FCA), que actúa como regulador de las empresas que facilitan el comercio de criptodivisas, advirtió en junio que un “número significativamente alto” de los 169 criptocomerciantes que retiraron sus solicitudes de acreditación ante el regulador no cumplían con los requisitos contra el blanqueo de capitales.
