Argentina sufre una importante crisis económica con una inflación del 50% que creciendo sin solución en los últimos años. La conducta habitual de la población es ahorrar y refugiarse en dólares cuando las crisis asoman. Como estrategia de restricción el gobierno argentino ha endurecido las medidas de controles y regulación para la venta de billetes norteamericanos. Los ciudadanos pueden comprar pocas cantidad o caer en un mercado paralelo que duplica el valor oficial.
Ante esta situación, se extienden en ese país opciones para canjear productos, servicios y hasta bonos de deuda pública por Bitcoin, una tentadora oferta para hacerse de dólares a través del BTC y pasar por encima a las restricciones oficiales. Un ejemplo de como las criptomonedas sirven para eludir cualquier condicionamiento y son resguardo de las distintas crisis locales.
La venta de autos, inmuebles, comercios y numerosos productos en el país del sur del continente se va ampliando aunque hasta el momento era un paso más en la gran adopción de criptomoendas entre sus habitantes (noveno en el ranking mundial). Sin embargo, el recrudecimiento de las restricciones al dólar ponen ahora al Bitcoin como un activo de resguardo y una forma de dolarizarse. Inclusive para solucionar algunas “injusticias” del cepo.
Muchos profesionales argentinos ofrecen sus servicios al exterior. Diseñadores gráficos, desarrolladores de sotfware, editores y periodistas, son algunos de los especialistas trabajan a distancia en otros países. Con el actual régimen de restricciones en el país pierden la mitad de los ingresos, por lo que la gran mayoría ya comenzó a cobrar en Bitcoin. Por un trabajo que se paga en el exterior USD 100, un trabajador que lo ingresa en el sistema tradicional, es decir que cobra mediante transferencia a cuenta bancaria, recibirá alrededor de 100 pesos argentinos mientras que al cobrar en BTC, podrá canjearlos directamente por el billete norteamericano o convertirlo en 200 pesos argentinos, al valor del mercado paralelo, el no oficial.
Cómo gran productor agrícolaganadero, Argentina ya tiene opciones de canjes o trueques de cosechas por productos y servicios. La más reconocida es la de Toyota, que cambia granos de trigo, soja y maíz por camionetas, algo que también se ofrece en Brasil. Ahora también se canjean cereales por criptomonedas.
En el 2020 se lanzó Agrotoken, una plataforma que ofrece las primeras monedas estables respaldadas en granos para que se puedan intercambiar por insumos o servicios, usar como garantía o acceder a otros activos criptográficos, un primer paso para llegar al Bitcoin a través de criptosoja (SOYA) y criptomaíz (CORA).
Fidustrade, una empresa servicios y soluciones blockchain ofrece el intercambio de cereales por Bitcoin, Una opción que le genera a los productores un rinde mucho mayor que a través del mercado tradicional. Para tomar el ejemplo de la soja, según la cotización de este momento, la venta por los canales tradicionales termina generando un pérdida del 10% entre el precio de cotización del cereal y lo que llega a la cuenta bancaria del productor. Mientras que con este nuevo sistema los costos operativos llegan apenas al 3%. Además de eludir cargas impositivas altas, el canje directo de cereales por Bitcoin permite reunirse con dólares fuera de cualquier cepo o restricción de cantidades.
Algunos ejemplo de lo que sucede en el sur del continente, el modelo argentino de como eludir restricciones para garantizar ingresos con le Bitcoin y hasta dolarizarse en una economía cerrada por la crisis.