A fines del 2020, Afganistan no figuraba en ningún listado. En un reciente informe de Chainalysis ubica a la nación talibán de Medio Oriente entre las primeras 20 naciones por volumen de adopción aunque no es la población que ingresa al criptomundo, son grandes inversores.
La gran crisis económica del país, con sanciones internacionales incluidas, provoca una gran escasez de la moneda local, al punto que algunos ha comenzado a comprar y vender en rupias paquistaníes. Hasta existen informes que hablan del uso de la moneda iraní en el oeste de Afganistán.
Este escenario es muy propicio para refugiarse en las criptomonedas aunque la población común afgana no puede acceder a Bitcoin y compañía por falta de información, escasez de recursos técnicos y monetarios.
Surge entonces como conclusión lógica del informe de Chainalysis que el gran volumen de operaciones cripto surgida en este país proviene de grandes inversores y algunos especialistas locales sugieren que es el propio gobierno talibán, que asumió hace poco le control del país luego del retiro de EEUU, es quien está comprando Bitcoin, con el objetivo de plantear una alternativa a la crisis actual y especialmente a las sanciones internacionales.
Por el momento no hay información oficial pero no habría que descartar la posibilidad que sea el propio gobierno quien se refugia en los criptoactivos, una herramienta fundamental para eludir posibles bloqueos internacional.