La pandemia ha generado una fuerte crisis económica a nivel mundial aunque ya se ha iniciado una recuperación. El problema es que todos los datos indican que esa recuperación será muy despareja y marcará aun más las diferencias entre países poderosos y el resto, un futuro de desigualdades cada vez mayores.
La inflación es un problema global que dejó lo más fuerte de la pandemia de Covid-19. En nuestra región se suma que algunos países sufren desde hace tiempo con un proceso inflacionario demasiado extenso. En tiempos de inflación los inversores buscan refugiarse en inversiones sólidas a largo plazo, para sostener sus capitales frente al aumento de precios y caída real de la valoración de la moneda. El oro fue es uno de estos históricos lugares donde esconder el dinero hasta que pase la tormenta. Por estos tiempos, algunos reconocidos inversionistas han empezado a apostar también a las ciptomonedas como un destino a largo plazo, aunque desde las versiones más tradicionales no se trate de un mercado estable, sino “muy volátil”.
Según especialistas como Goldman Sachs el manejo de la crisis del actual gobierno de Joe Biden de EEUU, está generando además de desempleo un proceso devaluatorio del dólar que ya le ha hecho perder un 5% y se calcula que llegará al 20% en los próximos años, todo provocado por una impresión de billetes sin ningún respaldo, lo mismo que se le critica a los activos digitales descentralizados. la diferencia enorme es que cada criptomoneda tiene un límite de emisión ya declarado por lo que en el futuro, a largo plazo, no tendrá estos procesos como está sufriendo en estos momentos el dólar estadoudinense.
En el corto plazo, especialmente en países de nuestra región, las critomonedas son un gran refugio contra la inflación para los inversionistas menores, quienes acumulando Btc y compañía, aun con sus fluctuaciones, sigue siendo una forma de capitalizarse en dólares.
Todavía no es posible asegurar que la balanza está cerca de inclinarse en favor de los criptoactivos pero la tendencia es clara. Muchos hombres fuertes de Wall Street no sólo apuestan al BTC como una forma alternativa de inversión. También reconocen que la alta emisión de billetes oficiales de los países más poderosos será un grave problema al futuro, que las monedas digitales centralizadas no lo van a tener. por esto, cada día invierten más en criptoactivos, sin especular tanto si caerá por debajo de 40 mil dólares o llegará a los 100 mil, sino como una reserva a futuro contra la inflación que generan las Casas de Monedas que imprimen billetes descontroladamente.